Son cojonudos. Fin. :m13d0:
:juer: ¡Si es que me lo busco!
En fin, si encuentro un hueco, pondré unas fotos (aunque imagino que por la red habrá) e intentaré organizar mis impresiones hasta el momento, ya que son una adquisición reciente.
Saludos,
Bueno, estaremos atentos, ya que me interesan para un regalo.
Saludos
He estado robando tiempo aquí y allá para anotar las impresiones que voy teniendo. Lo que sigue es sólo un intento de acomodar un corta y pega de ellas (perdón por al falta de concisión y la repetición de ideas). No es un análisis concienzudo ni hay comparaciones cara a cara con otros auriculares, aunque me refiero a algunos que me han venido a la memoria en el momento.
:hola:
Les presento a mis amigos los Radius HP-TWF11R, o W-Pro, o DDM...
(http://farm5.static.flickr.com/4080/4935205254_af00b8dbde.jpg)(http://farm5.static.flickr.com/4093/4934615177_55e0e8dd49.jpg)(http://farm5.static.flickr.com/4141/4935266002_d9ec8cdba5.jpg)(http://farm5.static.flickr.com/4074/4934639371_fa4259b0f4.jpg)(http://farm5.static.flickr.com/4138/4935238442_7d4f7ea541.jpg)(http://farm5.static.flickr.com/4096/4934657491_4e3a3ecb55.jpg)
Especificaciones: http://www.accessoryjack.com/-strse-1823/Radius-HP-dsh-TWF11-TWF11-Pro/Detail.bok (http://www.accessoryjack.com/-strse-1823/Radius-HP-dsh-TWF11-TWF11-Pro/Detail.bok) (Yo los compré en esta web porque en su momento, no digo ahora, era la más económica, y todo estupendo. Entrega en 5-7 días aprox.). Fetiches
Los DDM aportan el detalle y calidad de los últimos avances en IEM, pero en una suerte de híbrido de características cercanas a los auriculares de botón (algo más olvidados por los desarrolladores).
La anterior frase pretende resumir dos advertencias dispares, llamando a aquellos que deseen unos IEM para entornos de responsabilidad, y previniendo en su contra a los que busquen unos más al uso (deporte, calle, cama, aislamiento...).
También hay advertencias para fetichistas y pijos. :guay:
Los primeros babearán con su distintivo aspecto retro y colorista (reconozco que
en persona han llegado a gustarme bastante). Añadan que este diseño tiene los días contados y que pasará a la historia como el primero con doble transductor dinámico, o
Dual
Diaphragms
Matrix, y verán a dónde voy. Apuren, antes de que se agoten. ;D
Para los pijos (y todos llevamos uno dentro) expongo la situación:
En un rincón, y rey del momento, el SM3 y su aspecto superpro de más de trecientos pavos, el refinamiento de la DBA. ¡Viva la France! Al otro lado del ring, el primer experimento con la desconocida tecnología DDM. Por ciento veinticinco chuchas podrás leer manga mientras das la imagen correcta. ¡Banzai! :guitarra:
Con su estética oriental
shinny, shinny, con su ergonomía freaky (que ha forzado el cambio de diseño ya citado), con sus problemas de aislamiento y ruido del cable... ¿quién podría fardar con ellos? Son el dudoso miembro pobre del club aristocrático.
Por mi parte, he encontrado unos IEM que me apetece usar en el curro, ¡por fin! Cuentan con el aislamiento justo para no perder el contacto con el entorno, su escaso efecto tapón hace facilísimo extraerlos para atender al teléfono o a las visitas, y generan poca sensación de intrusión en el oído, aunque no sean exactamente confortables. Además, en casa, están siendo dignos suplentes de los cascos abiertos –impracticables con este calor–, para poder oír la puerta, el teléfono, a la familia...
(http://farm5.static.flickr.com/4137/4952666826_f01fb13ebf_m.jpg)(http://farm5.static.flickr.com/4120/4952070875_534123b7f1_m.jpg)(http://farm5.static.flickr.com/4085/4952657852_66616dd386_m.jpg)
(Hay tres formas razonables de llevarlos. Personalmente prefiero el cable tras la oreja o, también, esa forma rarita a 45 grados)
Ese halo embriagador
Era importante ocuparse de los aspectos externos. Pero me lanzo al agua de una vez.
El escenario sonoro es el elemento diferenciador. Se amoldan a cada tema, no imponen distancias preestablecidas. De la intimidad de un susurro a escenarios enormes (para unos intra). ¿El secreto? Nada es plano. Cada sonido cuenta con su propio espacio acústico alrededor, delimitándolo sutilmente. Pero, más importante aún, la totalidad de la música se presenta por estratos. Cada elemento en una capa, perfectamente separado del resto pero, al mismo tiempo, formando parte de la profundidad del conjunto. ¿Lo ven? Así, las partes y el todo quedan inevitablemente conectados, y nuestra atención pasa sin esfuerzo de la globalidad al detalle. Es su forma de hacerlo bonito, de trasladar un halo de elegante belleza al conjunto de su sonido.
Igual de adaptativos que son con el escenario, lo son con el
temperamento de los bajos, mientras los medios son bastante transparentes y los agudos neutros. Esto podría hacerte pensar que escuchas auriculares distintos de canción a canción. Pero, cuando se les ofrece un buen maridaje, son unos auriculares
radicalmente musicales. Así como el shoegaze genera una capa de ruido para conseguir que las melodías adquieran carácter mayestático (este es un ejemplo radical para esta idea), cuando la grabación lo permite, los bajos, debido a esa particular
dimensionalidad nombrada, adquieren una volumetría 3D que sirve de colchón para que los medios se eleven sobre ellos cobrando aún más vida y fluidez.
Esta es su eficaz forma de envolver y atrapar. Puede llevar unos minutos adaptarse, pero tras el ajuste todo cobra una indiscutible coherencia, y descubres que tus pies comienzan inevitablemente a llevar el ritmo y, si la canciones realmente te gustan, toda tu atención las seguirá hipnotizada. Uno se sumerge en ellas, deleitado por los mil detalles y matices, pero embelesado por la sensación global del conjunto. Todos sus abundantes detalles se asocian y sirven al hecho musical, a su disfrute (apenas despiertan el interés técnico o informativo que sí tiendo a ver con unos RE0). Consiguen ese sensual efecto de una media transparente en una pierna bonita. Aunque es sólo eso, una media que embellece pero no oculta los rasgos generales. Si te la pones en la cabeza, aplastará tu gorda narizota :P. No todas las piernas saldrán beneficiadas, ni las medias son para toda ocasión y vestimenta.
Me recuerdan al pop-rock de los ochenta o, de alguna forma, al sonido pelín ampuloso (en el buen sentido cuando hay inspiración) de Coldplay o Radiohead. Aunque más que épica es
grandeur. Pero mantienen siempre el equilibrio entre su musicalidad y la resolución requerida a los IEM de calidad. Por tanto, la música que se caracterice o agradezca un toque envolvente, elegante y soñador será la que mejor se lleve con los TFW11. Su carácter es relajado y, en general, recomendable para los que gusten de la música alternativa adulta –que sé que por aquí hay unos cuantos–, pero «más del Rockdelux que del Popu». Más de HD650 que de Grado. >D
No intromisión... Inmersión
Los medios generan un entorno con iluminación propia. Ésta nada tiene que ver con la que los agudos generan a base de brillo. No puedo evitar verles un toque de laboratorio, al ser muy detallados, pero –una vez más, gracias a la magia espacial mentada– resultan llenos y atractivos, sin atisbo de frialdad. Al contrario, resaltan cualquier vislumbre de emoción. El timbre de las voces e instrumentos, especialmente aquellos con particular textura o vibrato, destaca notablemente. En general, todo suena con claridad y excelente separación. Son el foco principal, y se diría que el resto de frecuencias gira entorno, yendo sólo tan lejos como sea posible sin intromisión en ellos.
Y en esto último, el mayor problema no son los graves. De alguna forma, creo que se ha venido a aceptar que los agudos coloren de claridad al resto de frecuencias, como si esto fuera más lícito que oscurecer con los bajos. Por comparación con los DDM, cualquiera de los IEM top que he probado resulta casi sibilante, y algunas de las sensaciones de velocidad, claridad y detalle son aparentes. Aquí, bien al contrario, se entregan con una nada sospechosa profusión de detalles y separación, con un timbre más natural, sin focalización ni brillos remarcados. Muy lejos de la agresividad de unos CK10, por ejemplo, y sobre fondo negro, si es que sirve la idea. La inicial sensación de auriculares oscuros (no lo son) seguramente se deba a esta característica más que a los graves. Por tanto, salvo que estén en primer plano en la grabación, son discretos, se limitan a su labor y ceden protagonismo. Comprensiblemente, muchos verán escasez, echarán de menos la
marcheta y tirarán de ecualizador. Para mis maltrechos oídos, tras una temporada de intensa e insana exposición a unos MX980 (sigo subiendo el volumen sin darme cuenta), estos agudos son un merecido descanso a tanta euforia y... brillo.
Con el mismo patrón de no intromisión en los medios, los graves son la cara opuesta, llegando mucho más lejos que la mayoría. Sus bajos son tan poco agresivos como los del RE0, hay control, detalle y precisión, pero ¿quién dijo que, a esa forma suave de presentar los graves, había que dejarles aspecto anémico? Frente al trazo grueso del gusto
basshead, tenemos unos bajos relajados que, sin embargo, se hacen presentes a base de extensión y textura. Y, en cuanto a textura, los DDM son auténticos camaleones. Que impacten, o parezcan escasos, es sólo cuestión de lo que exija el tema (¡qué reveladores son de los defectos de grabación en estas frecuencias!). Hay calidad y volumen geométrico (quizá demasiado para algunos, aunque sólo en esos temas con bajos ya marcados), pero no abuso en cantidad y coloración. El resultado, sin ser perfecto, compite con los mejores en este terreno y creo que supera a los IE8, sin atisbo de su famoso velo. Y, no, a pesar de su clara presencia no son el foco de atención. Excepto, quizá, al principio, cuando uno no ha entrado aún
into the groove.
Una vez
en la onda, olvidarás que la colocación de instrumentos de los CK10 es bastante más precisa. Su fuerte es hacerte olvidar músicos, colocación e instrumentos, y empujarte a llevar el ritmo con el pie, a quedar envuelto por la música. Si los citados Audio-Technica consiguen una presentación muy realista con sonidos de ensueño, los Radius utilizan un timbre muy natural con una presentación ensoñadora. Y aunque esto no significa que sean malos en su colocación, la realidad instrumental y técnica queda en segundo plano, y es la experiencia puramente musical lo importante. Es cuestión de inmersión.
Nadie es perfecto
Son increíblemente fáciles de mover. Pero una amplificación de perfil analítico y brillante podría ayudar a tamizar los graves y marcar los agudos, ajustándolos un poco a estos gustos. Y parece que ese será el camino sonoro que seguirá el futuro modelo HP-TWF21.
(http://farm5.static.flickr.com/4076/4952079039_69d15609ff.jpg)(http://farm5.static.flickr.com/4083/4952638770_0998264403.jpg)
(Dicen que los nuevos diseños tendrán este aspecto)
Francamente, no creo que técnicamente haya mucho que objetar habida cuenta de su rango de precio. Es todo cuestión de gustos, de perfil. Nadie los amará porque hagan algo mejor que ningún otro. Tan solo mantienen un terso y agradable equilibrio. Sin embargo, los DDM tienen en la propia música a su mejor aliado. Y, en lo que a mí se refiere, ellos ganan. Sin duda, seguiré divirtiéndome con los excesos de otros, pero seguro que vuelvo a su acogedor sonido. No son perfectos, pero su capacidad para meterte en ambiente y «quitarse de en medio», para recordarte por qué amas ciertas canciones, es impagable.
Sí, tienen todos los puntos para terminar siendo IEM de culto (¿existe tal cosa? :D).
Enhorabuena por la review y por los auriculares. No utilizo IEMs pero, habrá que tenerlos en cuenta.
Saludos
Excelente lectura, feldu. De verdad que he disfrutado leyendo tu artículo :)
blogoblo: que curioso, yo también me había quedado prendado de esas dos frases.
Pues sí, tienes bastantes hilos. Poco a poco, iré poniéndome al día. ;)
¿Cómo vas con los Shure SRH840?
Estaría bien saber de unos cascos con perfil parecido al de los W-Pro.
Saludos,